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5 razones por las que tus pacientes no sigue el tratamiento

  • Foto del escritor: DML Defensa Médico Legal
    DML Defensa Médico Legal
  • 7 jul
  • 3 Min. de lectura
pacientes no sigue el tratamiento

Uno de los desafíos más comunes —y a menudo invisibles— en la práctica médica es lograr que los pacientes cumplan con el tratamiento prescrito. A pesar de las mejores decisiones clínicas, muchos abandonan los medicamentos o las indicaciones antes de tiempo, con consecuencias que van desde la recaída hasta la hospitalización o la cronificación de la enfermedad.


Como médico, no basta con prescribir el tratamiento correcto. También es su responsabilidad comunicarlo de manera efectiva, hacer seguimiento y detectar posibles barreras que impiden al paciente cumplir con lo indicado.


5 razones por las que tus pacientes no sigue el tratamiento


A continuación, se analizan las causas más frecuentes de no adherencia, cómo prevenirlas y qué errores debe evitar en su práctica.


1. Comunicación clara: el primer paso para una buena adherencia


Una de las principales razones por las que los pacientes no siguen el tratamiento es simple: no entendieron completamente lo que se les indicó. El exceso de tecnicismos, las explicaciones apresuradas o la falta de claridad generan confusión y reducen la probabilidad de que el tratamiento se cumpla correctamente.


Buenas prácticas recomendadas:


  • Explique el objetivo del tratamiento en términos simples.

  • Asegúrese de que el paciente entienda cuánto debe tomar, a qué hora, y durante cuánto tiempo.

  • Use lenguaje accesible y confirme que el paciente comprendió lo esencial.


Evite asumir que "si no preguntó, entendió todo". Muchos pacientes no se atreven a decir que no entendieron.


2. Hable de los efectos secundarios: preparar al paciente evita el abandono


Cuando el paciente experimenta un efecto adverso inesperado, es más probable que suspenda el tratamiento sin consultarlo. Por eso, es fundamental anticiparse.


Incluya siempre en su explicación:


  • Los efectos secundarios más frecuentes y cómo manejarlos.

  • Cuáles son normales y cuáles deben ser motivo de consulta inmediata.

  • Qué hacer si olvidan una dosis.


Cuando el paciente sabe qué esperar, se reduce la ansiedad, aumenta la confianza y mejora la continuidad del tratamiento.


3. Realice seguimiento activo: no deje todo en manos del paciente


Indicar el tratamiento y desearle "buena suerte" no es suficiente. Una parte esencial del manejo clínico es el seguimiento. Incluso en enfermedades agudas, debe haber un mecanismo para verificar si el paciente respondió al tratamiento o si surgieron dificultades para cumplirlo.


Recomendaciones prácticas:


  • Agende la siguiente cita desde la misma consulta.

  • Si el seguimiento es telefónico, por correo o por mensaje, documente ese contacto.

  • Revise siempre si el paciente ha cumplido lo indicado. No espere a que él lo mencione.


Esta práctica permite corregir errores, ajustar tratamientos y, sobre todo, fortalecer la relación médico-paciente.


4. Identifique barreras: ¿por qué no siguen el tratamiento?


No todos los abandonos son por desinterés. A menudo, los pacientes enfrentan barreras económicas, sociales o emocionales que impiden el cumplimiento terapéutico.


Pregunte directamente:


  • ¿Tiene dificultad para conseguir o pagar los medicamentos?

  • ¿Ha tenido efectos secundarios molestos?

  • ¿Le preocupa algo relacionado con el tratamiento?

  • ¿Cree que no lo necesita porque ya se siente bien?


Las respuestas a estas preguntas pueden revelar obstáculos que usted puede ayudar a resolver, por ejemplo, ajustando el tratamiento, ofreciendo alternativas más económicas o reforzando la importancia de continuar.


5. Errores comunes que debe evitar


Existen algunas prácticas que, aunque comunes, debilitan la adherencia terapéutica y aumentan el riesgo de mala evolución clínica o conflicto médico-legal:


  • Asumir que el paciente entendió todo sin confirmación explícita.

  • No entregar instrucciones claras por escrito (ni en la receta ni verbalmente).

  • Ignorar señales indirectas de no cumplimiento (como frases del tipo: “ya me siento mejor”, “no me ayudó mucho”).


Una atención proactiva y empática puede prevenir muchos de estos errores.


El seguimiento también es parte del tratamiento


Lograr que el paciente siga el tratamiento no es un tema menor ni una tarea exclusiva del paciente. Es parte integral de la práctica médica. En muchas ocasiones, el éxito terapéutico no depende solo del diagnóstico, sino de la capacidad del médico para acompañar, explicar y verificar.


En Protección Médico Legal, recomendamos documentar siempre la orientación brindada, anotar cualquier negativa o dificultad para cumplir con el tratamiento y dejar constancia del seguimiento. Esto no solo mejora los resultados clínicos, también protege tu práctica profesional ante eventuales reclamos.


Recuerde: Un paciente informado, comprendido y acompañado es mucho más probable que sea un paciente adherente.



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