Recomendaciones de la OMS para proteger la salud mental de los médicos
- DML Defensa Médico Legal
- 13 oct
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La salud mental de los profesionales sanitarios atraviesa una crisis profunda que, aunque no siempre visible, se ha convertido en un problema estructural dentro de los sistemas de salud del mundo.Los médicos, quienes dedican su vida al cuidado de los demás, hoy enfrentan una realidad paradójica: son ellos quienes más sufren el desgaste emocional, el agotamiento y las secuelas psicológicas derivadas de su labor diaria.
Según datos recientes de la Organización Mundial de la Salud (OMS), la magnitud de este problema ha alcanzado niveles alarmantes. El estudio más grande sobre el tema, realizado en Europa, ofrece un panorama que refleja una situación similar en América Latina, incluido México.
Un panorama alarmante: el estado actual de la salud mental médica
El estudio “Salud Mental de Enfermeras y Doctores”, publicado por la OMS, recopiló más de 90,000 respuestas de profesionales de la salud en 27 países de la Unión Europea, además de Islandia y Noruega. Los resultados revelan el impacto acumulado de años de sobrecarga laboral, infrafinanciación y precariedad en el empleo médico.
Uno de cada tres médicos o enfermeros reportó haber sufrido acoso o amenazas violentas en su lugar de trabajo durante el último año, y el 10% declaró haber experimentado violencia física o acoso sexual.Además, uno de cada cuatro médicos trabaja más de 50 horas semanales, mientras que casi un tercio tiene contratos temporales, un factor que incrementa la ansiedad y el estrés por la inseguridad laboral.
El dato más preocupante del informe es que uno de cada diez profesionales de la salud manifestó haber tenido pensamientos de muerte o autolesión en las últimas dos semanas previas a la encuesta. Estos pensamientos suicidas “pasivos” se consideran un indicador temprano de riesgo de suicidio, lo que demuestra la gravedad del problema.Asimismo, uno de cada tres médicos afirmó sufrir síntomas de depresión o ansiedad clínica, una cifra que duplica la prevalencia observada en la población general.
La OMS fue contundente: un entorno laboral inseguro y poco predecible tiene una relación directa con la mala salud mental del personal sanitario. En consecuencia, los médicos presentan el doble de prevalencia de pensamientos suicidas que otros sectores profesionales.
El sentido de propósito: una fuerza que mantiene al sistema en pie
Pese al panorama adverso, los resultados del estudio también revelan la fortaleza y compromiso del personal sanitario.Tres de cada cuatro médicos y dos de cada tres enfermeros afirmaron que su trabajo les brinda un fuerte sentido de propósito y significado, lo que les impulsa a continuar incluso bajo condiciones difíciles.
Como expresó la residente francesa Mélanie Debarreix:
“Elegimos un camino de humanidad, pero eso no significa que dejemos de ser humanos nosotros mismos.”
El estudio también alertó sobre el impacto que este desgaste tiene en la retención del talento médico. Entre el 11% y el 34% de los trabajadores de la salud manifestaron estar considerando abandonar su empleo, lo que podría agravar la escasez de personal y afectar directamente la calidad de la atención. La consecuencia sería clara: más demoras, menor calidad asistencial y pérdida de personal clave para el funcionamiento del sistema de salud.
Recomendaciones de la OMS para proteger la salud mental de los médicos
Ante la gravedad del problema, la OMS propone una serie de medidas estructurales para revertir esta crisis y proteger el bienestar de quienes sostienen los sistemas de salud en todo el mundo. Las principales líneas de acción incluyen:
1. Tolerancia cero ante la violencia laboral
Establecer políticas firmes contra cualquier forma de violencia o acoso dentro de los centros médicos. Esto implica protocolos de denuncia, protección a las víctimas y sanciones claras.
2. Mejora de los turnos y control de las horas extra
Garantizar turnos previsibles y descansos adecuados para erradicar la cultura del agotamiento. El exceso de trabajo no solo afecta la salud del médico, sino también la seguridad del paciente.
3. Gestión adecuada de las cargas laborales
Revisar los modelos de trabajo que sobrecargan al personal y redistribuir responsabilidades mediante equipos multidisciplinarios. La sobrecarga constante deteriora la salud mental y reduce la productividad clínica.
4. Liderazgo empático y formación en gestión humana
Capacitar a los líderes hospitalarios para que identifiquen signos tempranos de agotamiento en su equipo, promuevan la comunicación abierta y prioricen el bienestar emocional.
5. Acceso a apoyo psicológico y programas de bienestar
Desarrollar servicios accesibles, confidenciales y especializados en salud mental para el personal médico. Incluir líneas de ayuda, terapia psicológica y espacios de autocuidado institucional.
6. Monitoreo continuo del bienestar del personal
Implementar evaluaciones periódicas de salud mental, medir el clima organizacional y reportar los avances en bienestar como parte de los indicadores de calidad institucional.
Estas estrategias no solo buscan proteger al profesional, sino también garantizar la sostenibilidad del sistema de salud. Un médico saludable es un médico más empático, resolutivo y capaz de brindar una atención de calidad.
Cuidar a quienes cuidan
La salud mental de los médicos no puede seguir siendo un tema secundario. La evidencia demuestra que el desgaste emocional y la violencia laboral no solo afectan al individuo, sino también al sistema de salud en su conjunto.
Implementar políticas de bienestar, horarios más humanos y apoyo psicológico continuo no es un lujo, sino una necesidad urgente.Cuidar a quienes cuidan es la base de un sistema sanitario eficiente, humano y sostenible.Porque un médico con buena salud mental es, ante todo, un profesional capaz de ofrecer lo mejor de sí a cada paciente.
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